Uno de los productos que más revolucionó la tecnología y el mundo de la música fueron los cassettes. Fueron algo increíble, pues en un pequeño cuadrado de plástico podíamos almacenar algunas canciones por ambos lados; con su popularidad llegaron al mercado un dispositivo portátil único y novedoso: el Walkman. Este aparato fue el accesorio de moda durante muchos años, pues a parte de representar la música, años después los modelos salían con colores y diseños muy atractivos.
El primer walkman fue lanzado en el año de 1979 y el primer modelo que se lanzó fue el TPS-L2. Como todo aparato nuevo, su precio era muy elevado en un principio, pero debido a su éxito el precio empezó a bajar. Los primeros modelos reproducían un cassette de la marca philips, este permitía grabar 30 minutos de cada lado. Ya después de su éxito, se le agregó radio am/fm. En el año de 1983 salió a la venta su edición “sport”, este era resistente al agua o sudor y a caídas.
Este aparato dio como “hijo” al Discman, una evolución del cassette. Tras la llegada de discos compactos Sony decidió hacer un mismo aparato móvil para reproducir los famosos discos. También existieron mini disc y reproductores con tarjetas de memoria.
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